En seis años, la Generación Z constituirá el 58% de la fuerza laboral en México, según un estudio de ManpowerGroup. Esta transición generacional representa un cambio significativo en el entorno laboral del país, donde las prioridades de los jóvenes centennials, como también se les conoce, están marcando nuevas tendencias.
Fernando Bermúdez Pire, director de Relaciones Corporativas de ManpowerGroup, destacó que los centennials buscan trabajos que ofrezcan un propósito, oportunidades de aprendizaje, diversidad, inclusión y flexibilidad. Además, los jóvenes de 18 a 24 años muestran una fuerte preocupación por el medio ambiente, con el 75% investigando la reputación medioambiental de las empresas antes de postularse a un empleo.
Este enfoque responde a un contexto climático adverso, en el que la Generación Z estará de cuatro a siete veces más expuesta a las olas de calor y otros efectos del cambio climático que las generaciones anteriores. Como resultado, exigen que sus empleadores asuman responsabilidades claras en estos aspectos y que impulsen cambios en la cultura laboral.
A medida que más empleados alcanzan la edad de jubilación, los empleadores deben centrarse en atraer y retener a la Generación Z. Bermúdez Pire subrayó la importancia de los programas de formación cruzada, que permiten a los jóvenes y a los empleados de mayor edad transferir conocimientos, asegurando que no se pierdan en esta transición generacional.
Asimismo, el 60% de los empleados de la Generación Z espera que sus empleadores ofrezcan desarrollo profesional personalizado, con mentores y planes de progresión adaptados a sus objetivos personales. Esta demanda es innegociable para ellos, que valoran la actualización constante de competencias, tanto técnicas como habilidades blandas.
El impacto de la Generación Z no solo se limita a sus propios miembros; también está influenciando a los Millennials, la Generación X y los Boomers. Según Bermúdez Pire, el 93% de los empleados de estas generaciones ha adoptado cambios en su equilibrio entre trabajo y vida privada, así como una mayor apertura a las nuevas tecnologías, gracias a la influencia de la Generación Z.
Este cambio en la dinámica laboral subraya la necesidad de que las empresas en México se adapten a las expectativas y valores de la próxima generación de trabajadores, quienes están redefiniendo el concepto de trabajo y las prioridades en el ámbito laboral.