Durante su conferencia mañanera de este miércoles, la presidenta Claudia Sheinbaum abordó directamente los rumores y detalles de la Reforma Electoral propuesta por su gobierno. En respuesta a las preguntas de periodistas, enfatizó que el objetivo principal es modernizar el sistema electoral sin comprometer la autonomía de las instituciones, reduciendo costos innecesarios y optimizando la representación política.
Sheinbaum rechazó enfáticamente las acusaciones de que la reforma busca eliminar o controlar organismos clave como el Instituto Nacional Electoral (INE). “Es falso que la Reforma Electoral pretenda desaparecer los órganos electorales”, afirmó la mandataria, asegurando que el INE “mantendrá su autonomía”. Además, aclaró que el padrón electoral y la lista nominal seguirán siendo propiedad de los ciudadanos y permanecerán bajo el control del INE, desechando cualquier idea de centralización en el Ejecutivo.
Uno de los pilares de la propuesta es la reducción de gastos en el proceso electoral y en el financiamiento a partidos políticos. La presidenta explicó que se busca disminuir el presupuesto asignado, ya que actualmente “los partidos políticos reciben más de 15 mil millones de pesos anuales”. Para lograrlo, sugirió explorar alternativas como el voto electrónico, que no solo abarataría las elecciones sino que facilitaría la participación de los mexicanos en el extranjero. Estimó que el presupuesto para el INE rondaría los 15 mil 300 millones de pesos, manteniendo su independencia operativa.
Otro tema central fue la revisión del sistema de diputados y senadores plurinominales, que Sheinbaum criticó por el contexto actual. Recordó que este mecanismo surgió en los años 70 para dar voz a minorías durante la llamada “apertura democrática” bajo el presidente Luis Echeverría, pero ahora genera desigualdades. “Hay partidos políticos que sólo ganaron un diputado y tienen 17 diputados”, señaló, y agregó que “la gente no está de acuerdo en que haya tantos plurinominales”. Propuso eliminar o reducir estos puestos en ambas cámaras legislativas, sin eliminar la representación de minorías, sino ajustándola para mayor equidad.
La presidenta destacó que el proceso de discusión apenas comienza en la Secretaría de Gobernación, con mesas de trabajo abiertas al diálogo. “Por eso abrimos a la discusión nuestra opinión”, dijo, resumiendo los ejes en fortalecer los organismos electorales, bajar costos y eliminar excesos en plurinominales. Esta intervención surge en medio de críticas opositoras que, según Sheinbaum, propagan información falsa para desestabilizar la propuesta.
En resumen, la Reforma Electoral busca una democracia más eficiente y accesible, respondiendo a demandas ciudadanas por transparencia y ahorro público, sin alterar las bases independientes del sistema electoral mexicano.