El ecosistema de startups en México continúa su ascenso, consolidándose como un entorno fértil para la innovación y el emprendimiento. Según el Global Startup Ecosystem Index Report de StartupBlink, México ocupa la cuarta posición en Latinoamérica entre los mejores ecosistemas para startups, destacándose a nivel regional a pesar de un ligero descenso en el ranking global.
En el informe, que analiza 1,000 ciudades y 100 países, México se ubicó en la posición 41 a nivel mundial, cuatro lugares por debajo del ranking del año anterior, cuando ocupaba el puesto 37. A nivel regional, México es superado por Chile (39), Colombia (38) y Brasil (27). Sin embargo, su posición en Latinoamérica es un reflejo del dinamismo y la competitividad del ecosistema emprendedor mexicano.
Los diez mejores países a nivel global para startups son: Estados Unidos, Reino Unido, Israel, Canadá, Singapur, Suecia, Alemania, Francia, Países Bajos y Suiza. Dentro de este contexto, México también destaca al ocupar la sexta posición en el número de startups apoyadas por Y Combinator, una de las aceleradoras de empresas emergentes más importantes del mundo.
En cuanto a las ciudades mexicanas, la Ciudad de México es la más destacada para el emprendimiento, aunque perdió su lugar en el Top 50 global, ubicándose ahora en la posición 53. A nivel regional, CDMX es la segunda mejor ciudad después de São Paulo, que ocupa el puesto 23. Otras ciudades mexicanas que figuran en el ranking son Monterrey, Guadalajara, Puebla, Chihuahua, Querétaro, León, Cancún, Irapuato y Tijuana.
El crecimiento de las startups en México se ve impulsado por varios factores clave. La proximidad a Estados Unidos y el impulso del nearshoring han sido determinantes, así como un entorno de bajos costos operativos. Además, el apoyo de inversionistas y la diversificación de estos grupos han sido cruciales para el éxito de muchas startups mexicanas. Fondos aceleradores han respaldado a empresas emergentes prometedoras como Jüsto, Crema, Merama y Trendi.
El informe de StartupBlink también subraya la importancia de continuar apostando por el talento local y de fomentar iniciativas tanto públicas como privadas que faciliten el crecimiento de estas empresas. Este enfoque no solo elevará el perfil de México en el ámbito global del emprendimiento, sino que también contribuirá al crecimiento económico del país.
En conclusión, a pesar de algunos desafíos, México sigue destacándose como un ecosistema vibrante para startups en Latinoamérica. La combinación de factores estratégicos y el continuo apoyo a la innovación son esenciales para mantener y mejorar esta posición en el futuro.