Por: Alejandra Bailon
El pasado lunes 8 de enero del 2024, despegó “Peregrin” el primer proyecto robótico mexicano de la Misión Colmena, liderado por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM); en llegar a Luna. El despegue rumbo a la Luna, marca un hito en los esfuerzos de la investigación espacial, ya que se convierte en el primer lanzamiento mexicano que aterrizará en el único satélite natural de nuestro planeta.
El cohete despegó alrededor de la 01:20 de la madrugada desde Cabo Cañaveral, equipado con cinco micro robots que buscan experimentar, estudiar y probar cuáles son los riesgos ante los escenarios más hostiles o desafiantes de la superficie lunar.
Los cinco micro robots tendrán que encarar los efectos de vibración y choques del cohete en el que viajarán, también se van a enfrentar a las variaciones abruptas de la temperatura lunar, su alta radiación, la interferencia producida por la electromagnética y por el regolito lunar. Esta clase de efectos, son normales al emprender proyectos en el espacio, sin embargo, cuando se trata de “micro proyectos” estos efectos se vuelven más complejos. En el caso de los 5 micro robots que acompañan a Peregrin, son robots de apenas 60 gramos y miden 12 centímetros de diámetro.
El uso de estos micro robots convierte a la Universidad y a sus más de 250 estudiantes y universitarios que participaron en el proyecto en pioneros en todo el mundo en utilizar una tecnología tan pequeña para estudiar la luna, además convierten la misión como la primera en llevar a México a la Luna.